Conoce los cambios y las tendencias educativas de 2023 que transformarán el modelo de educación superior actual.
La educación es uno de los sectores que ha experimentado mayor cambio en los últimos años. Un sector en un importante momento de transformación digital que experimenta día a día grandes cambios, los cuales están configurando un nuevo escenario para la educación superior.
Por eso, en este artículo te descubrimos 3 tendencias de educación superior que tienes que conocer este 2023:
1. Los modelos de educación híbrida han venido para quedarse
La demanda de la educación online ha experimentado un gran crecimiento desde el año 2020 con la aparición de la covid-19.
Un crecimiento que ha puesto sobre la mesa una realidad: hay muchos estudiantes que están interesados en otro tipo de formato educativos que el modelo presencial tradicional.
Aún así las previsiones indican que este 2023 habrá una ralentización del crecimiento de la educación 100% online respecto a los años anteriores. Y esta previsión no indica el fin del formato online, sino una transformación global del sector: la consolidación de la educación híbrida.
Un nuevo formato educativo que ha venido para quedarse y que está transformando el modelo educativo tradicional.
El modelo híbrido o también llamado blended learning, es aquel en el que se combinan las interacciones digitales con las interacciones humanas. Esta “presencialidad” puede ser más o menos frecuente y de distinto formato (reuniones de grupos pequeños, talleres, sesiones de trabajo en grupo, etc).
Este escenario implica que los centros de educación superior deben ser capaces de adaptar su modelo educativo y sus infraestructuras para añadir este otro formato a su oferta educativa.
En caso contrario, perderán un enorme potencial de estudiantes que se decantarán por otras instituciones formativas y más adaptadas a las nuevas realidades educativas que están por venir.
Y este cambio de paradigma del modelo educativo implica también mayor competencia para todo el sector. Ahora cualquier centro educativo podrá tener estudiantes de cualquier sitio del mundo. Lo que supone que se acaban las limitaciones por zona geográfica, pero también que cualquier centro de estudios de cualquier punto del mundo puede pasar a ser tu competidor.
Una oportunidad que no se puede desaprovechar y, a la vez, una nueva complejidad a añadir a los equipos de admisión en su proceso de captación de candidatos y futuros estudiantes.
2. La accesibilidad y la tecnología son un must
En contexto en el que la limitación geográfica ya no es una barrera y tu estudiante puede ser de cualquier punto del mundo, la accesibilidad no es negociable.
Los centros educativos deben estar capacitados para ofrecer herramientas y sistemas que funcionen en cualquier lugar del mundo y en cualquier dispositivo. Que sean fáciles de usar. Y, por supuesto, que estén donde el estudiante esté, es decir, accesibles en su dispositivo móvil principalmente.
Los campus virtuales, las intranets o los espacios de trabajo compartidos ya no son suficientes. La tecnología se ha convertido en un must, y en especial, para las jóvenes generaciones. Y por este motivo, el entorno digital que tu centro educativo le proporciona también juega un papel clave en la elección de centro o estudio.
La realidad virtual, la inteligencia artificial o el metaverso serán más que palabras en un futuro no muy lejano.
Y no serán únicamente noticia por facilitar la realización de trabajos o de exámenes para los estudiantes como está ocurriendo en este inicio de año con herramientas de inteligencia artificial como Chat GPT 3.
3. La gamificación
La mayoría de personas creen que la gamificación aplicada a la educación consiste únicamente en integrar juegos en el proceso de enseñanza con el objetivo de que los estudiantes se lo pasen bien. Pero la realidad es que el potencial de la gamificación es mucho más amplio.
No se trata de convertir una lección teórica en un juego introduciendo por ejemplo un kahoot al final de una sesión y ya está.
Sino que las posibilidades que ofrece la gamificación exigen ir mucho más allá con el objetivo de ofrecer una mejor experiencia de aprendizaje al estudiante y al centro educativo.
Y para ello se requiere un importante análisis previo que defina una serie de preguntas como:
¿Cuáles son los objetivos de implementar una estrategia de gamificación en el centro? ¿Qué logros obtendrán los estudiantes? ¿Cómo se visibilizarán estos logros? ¿Cuál es la estrategia a corto plazo? ¿Y a largo plazo? ¿Qué resultados esperas obtener como centro educativo?
Sin duda, la gamificación será una gran aliada de presente y de futuro para la educación y el sector debe prepararse para ello.
Los beneficios que le aportará al centro son innumerables:
- incrementar la motivación a corto y largo plazo a nivel académico,
- reducir la tasa de abandono actual,
- potenciar los skills y las habilidades de cada uno de los estudiantes en beneficio de toda la comunidad,
- mejorar el engagement del estudiante con el centro,
Pero por supuesto estos beneficios serán alcanzables siempre y cuando se construya una estrategia de gamificación con un claro enfoque student centric.
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